Se forma Depresión Tropical Dos y podría convertirse en huracán Beryl
El Centro Nacional de Huracanes informó que se formó la Depresión Tropical Dos en el oceáno Atlántico.
Su centro se localiza a mil 970 km al este-sureste de Barbados.Presenta vientos máximos sostenidos de 55 km/h, rachas de 75 km/h y desplazamiento al oeste a 33 km/h.En la trayectoria del pronóstico, se espera que el sistema se mueva a través de las Islas de Barlovento el domingo por la noche y el lunes.
El pronóstico indica que la Depresión Tropical Dos se podría convertir en tormenta tropical Beryl por la noche de este 28 de junio y en huracán Beryl la madrugada del domingo 30 de junio.
Se espera que la Depresión Tropical Dos produzca totales de lluvia de 3 a 6 pulgadas a través de Barbados y las Islas de Barlovento.Esta lluvia puede producir inundaciones localizadas en áreas vulnerables.
Por ahora representa riesgo para El Caribe, así como para las costas de Venezuela y Colombia. En cuanto a su intensidad, indica que la previsión es que alcance la categoría 2 entre el domingo y el lunes, para luego debilitarse.
Este fue el desarrollo de Beryl
La formación del ciclón tropical Beryl estaba previsto desde hace días. El pasado 27 de junio alcanzó el 90% de probabilidad de desarrollo ciclónico en una semana y a 70% en 48 horas; para ese momento era una zona de baja presión y no depresión tropical.
El incremento acelerado de la probabilidad de que se forme Beryl comenzó desde el 25 de junio, cuando la zona de baja presión no era un hecho y su probabiliad de desarrollo ciclónico en 7 días era del 20 por ciento, según el reporte de las 18 horas.
En cuestión de horas la cifra se triplicó, pues para la misma hora pero del 26 de junio, la probabilidad ya era de 60 por ciento. El porcentaje aumentó progresivamente hasta alcanzar el 90% y evolucionar a depresión tropical.
¿Qué es una depresión tropical y de qué depende su evolución a huracán?
Una depresión tropical es un sistema climático caracterizado por una circulación cerrada de vientos alrededor de un centro de baja presión, con vientos máximos sostenidos inferiores a 63 km/h. Se forma generalmente en regiones tropicales y es el estadio inicial en el desarrollo de ciclones tropicales.
La transición de una depresión tropical a huracán depende de varios factores, incluyendo:
Temperatura del agua del mar: necesita agua caliente, generalmente superior a 26.5°C, para alimentar el sistema.
Humedad atmosférica: altos niveles de humedad en las capas inferiores y medias de la atmósfera favorecen la intensificación.
Baja cizalladura del viento para permitir que el sistema mantenga su estructura vertical.
Interacción con otros sistemas climáticos: perturbaciones atmosféricas, como ondas tropicales, pueden contribuir a fortalecer el sistema.
Si estas condiciones se mantienen, la depresión tropical puede intensificarse y convertirse en tormenta tropical y, finalmente, en huracán, con vientos sostenidos de al menos 119 km/h.
Actualmente existe un sobrecalentamiento del agua de mar en el Atlántico, condición que ha favorecido el desarrollo de bajas presiones en el Golfo de México y ondas tropicales en fechas recientes.