Dictan 8 años de prisión a rusa que roció ácido a un sacerdote.
Ocho años deberá descontar en la cárcel la rusa Ellis Leonidowna Gonn por haber rociado con ácido sulfúrico al sacerdote Mario Guevara Calero, a quien le causó quemaduras en varias partes de su cuerpo y haber puesto en peligro al feligrés Roberto Pineda.
En la sentencia dictada por la jueza Sexto Distrito Penal de Juicio de Managua, se condena a Ellis Leonidowna a seis años de prisión por el delito de lesiones graves en perjuicio del sacerdote y dos por exposición de personas al peligro en detrimento de Roberto Pineda, quien fue el primero en auxiliar al religioso de 55 años.
La condena para la mujer de origen ruso concluirá el 4 de diciembre del 2026.
Los hechos por los cuales Ellis Leonidowna pasará varios años en prisión acontecieron la tarde del 5 de diciembre del 2018, cuando el religioso impartía el sacramento de la confesión en la catedral Inmaculada Concepción de María, en Managua.
En la sentencia, la jueza Aracely Rubí señala como agravante el hecho que la condenada haya planificado su acción.
“Bajo un plan pre-concebido ella (Ellis Leonidowna) consiguió las herramientas (el ácido sulfúrico) que le asegurara la ejecución del hecho, escogió el lugar y una víctima en específico, colocándose en una situación de superioridad en relación a la víctima”, explica la judicial.
La jueza Rubí también considera como agravante en la sentencia, el hecho que la víctima, el padre Mario Guevara Calero, no podrá seguir su vida de manera normal por las lesiones que le causó Ellis Leonidowna.
Como tercer agravante, la judicial señala que en el hecho hay más de una víctima.
Como único atenuante a favor de la condenada que encontró la judicial a favor de la sentenciada, es que no tenía antecedentes penales.
En la parte resolutiva de la sentencia, la jueza Aracely Rubí ordena que la condenada reciba tratamiento ambulatorio en el Hospital Psiquiátrico y de ser necesario, medicamentos para tratar sus estados depresivos.
La decisión que Ellis Leonidowna reciba tratamiento especializado en salud mental es por recomendación de una psiquiatra de Medicina Legal, la cual establece que la sentenciada padece de estados depresivos.
El día del ataque, Elis Leonidowna roció de ácido sulfúrico al padre Mario cuando este se dirigía al área de confesionarios; fue interceptado por un feligrés, quien le pidió que bendijera unos crucifijos, y en ese momento la mujer le echó el líquido por la espalda.
“El padre, al sentir el líquido volteó hacia atrás y fue ahí cuando la mujer le tiró en la cara”, relató uno de los guardas del templo.
La mujer fue capturada en el atrio de la Catedral de Managua, cuando intentaba escapar después haber arrojado el ácido al sacerdote.
Las quemaduras que sufrió el sacerdote agravaron algunos padecimientos de salud que tenía el religioso.